Estos días en Perú, el diseñador Gerardo Privat ha dado que hablar tanto por su talento creativo en las pasarelas como por su no menos polémico spot publicitario a favor de La liga contra el cáncer. Aquí un par de apreciaciones al respecto.
Minutos antes del desfile, mientras el público esperaba el inicio de la pasarela de verano de Privat, el vídeo en este link apareció en la pantalla. Días después, el mundo de la moda y la comunicación empezarían a hablar de él, a favor o en contra. No sé quien tiene razón aquí, lo cierto es que personalmente encontré esta campaña muy imprudente.
Los que hemos visto el spot queremos pensar que la intención es buena y efectivamente apoyar a la causa, aún así en comunicación hace falta mucho más que buenas intenciones y propósitos al momento de transmitir un mensaje. Hace falta pensar detenidamente en lo que vamos a comunicar, encontrar el núcleo del mensaje y darle vida creativamente, para finalmente presentarlo de forma atractiva, cuidada y bien producida al público.Al menos eso es lo que los profesionales de la comunicación intentan -y algunos logran- día a día.
Con esto, quiero decir que creo que hubo dos fallas cruciales.
1. El mensaje no fue correctamente transmitido, pues el dialogo y las escenas no comunican "queremos que seas consciente del cáncer". Se habla de fabulosidad, de glamour, de tener. Con decir, al final del anuncio, "también tengo cáncer" -como quien se olvida de lo que iba a decir y para que-, no se crea conciencia.
2. Si solo viera el vídeo sin pensar en lo que dice, pues diría que su calidad y la producción no fueron las mejores. No expresa la seriedad del tema, ni siquiera la fabulosidad pretendida.
Disculpen si esto no fue tan stylish como el usual contenido de este blog. No quería dejar de decir lo que pienso sobre esto. La moda y la belleza no debe ser necesariamente sinónimo de frivolidad, ni de oportunismo. Creo que esa es la moraleja que nos deja este anuncio.
Muy de acuerdo contigo Stylish girl! No se supo mostrar la idea central, cayendo en lo superficial y lo frívolo.
ResponderEliminarEs un ejemplo más de cómo se pierde la esencia del mensaje, si todo se queda en los elementos de una producción. Lo que pudo ser una campaña de conciencia, quedó solo como una burla y falta de consideración.
Saluditos,
http://trendyway.blogspot.com