Elegance like Audrey

Si de inspiración hablamos, muchos personajes se nos pueden ocurrir. Pero estoy segura, de que todos coincidiremos en que Audrey Hepburn es un modelo a seguir en cuanto a estilo se trata.

¡Ojo¡ Modelo a seguir no significa persona a imitar. No hay nada menos estiloso que disfrazarse de alguien más. Lo importante es rescatar detalles del estilo de otros y combinarlos con el nuestro: se trata de personalizar tu estilo.

Uno de los íconos del girly style.

Y si eliges a Audrey como una de tus referentes, tu estilo se verá enriquecido totalmente, pues la elegancia natural y la sofisticación son las características fundamentales del vestuario de esta actriz de los años 50.

Una de las virtudes que la hizo famosa fue su sencillez. Por eso, en los plató de sus películas, todos la amaban. Esta fue una virtud que no solo cultivó en su vida personal y profesional, sino que también la trasladó a su estilo.

Los cigarettes pants que tanto usaba, así como sus outfits sin muchos accesorios son un gran ejemplo de esa virtud.

 Los predecesores de los pitillos

Audrey. Sencilla, clásica y sofisticada.

Además, siempre se mantuvo fiel a las prendas clásicas y básicas de la moda. Por eso siempre se veía muy sofisticada sin mucho esfuerzo, porque no solo sabía elegirlas sino también combinarlas de forma que definiera su figura y acentuara su cintura.

Cintura definida

Inmortal Little Black Dress que define muy bien su cintura.

Su fama creció gracias a películas como Roman Holiday, por la cual ganó el Oscar a mejor actriz, o My Fair Lady. En ambas, lució muy elegante y sencilla, pero no fue hasta Breakfast at Tiffany's cuando se ganó la simpatía de la gente por su estilo. 

Con Gregory Peck en Roman Holiday

En My Fair Lady

Como Holly, en Breakfast at Tiffany's

Llegó a convertirse un icono del buen vestir y la moda, un título que ella siempre se negó a aceptar -hablando de sencillez y humildad-. Por eso nunca aceptó ser imagen de ninguna casa de moda, ni a vestirse con grandes marcas. La excepción: Givenchy, una marca que la amó tanto como Audrey a ellos. 

En la portada de Vogue con un look de Givenchy.